Con una gran fiesta y más de 300 invitados, Plasmatreat celebró en septiembre su 20 aniversario en las nuevas oficinas en Steinhagen, Westfalia.
"Si algo es típico de Plasmatreat, esto es el cambio". Con estas palabras, Christian Buske, el director general de Plasmatreat GmbH y presidente/CEO del Grupo Plasmatreat describió durante su discurso la transformación constante y provechosa de la empresa en los pasados 20 años. Los más de 300 invitados – empleados, socios cercanos y amigos de la empresa – escuchaban con mucha alegría el discurso.
En el año 1990, después de sus estudios de Cibernética y Tecnología de Automatización en la Universidad Técnica de Leipzig, el futuro empresario de apenas 27 años había llegado con su esposa Christiane a Steinhagen, donde pronto el plasma se convirtió en su pasión. Junto con su socio de entonces, el ingeniero e inventor Peter Förnsel, él desarrolló la tecnología de toberas Plasma Openair® y al mismo tiempo con la fundación de Plasmatreat GmbH en 1995 se registró la patente.
Simultáneamente, Buske logró con la tecnología innovadora el estreno mundial del plasma atmosférico a escala industrial. Por esta razón, él estaba muy feliz de dar la bienvenida particularmente a Simone Rohrberg, especialista en adhesivos e ingeniera de desarrollo de procesos en HELLA, Lippstadt. Fue HELLA, el proveedor más grande de tecnología de iluminación y productos electrónicos para automóviles, que compró la primera instalación de Plasma Openair® y a continuación utilizaba para el pretratamiento de faros en la producción en serie.
Después de HELLA siguieron muchos nombres - grandes y pequeños - y Plasmatreat se expandió a nivel internacional. Desde el principio, la cooperación con universidades e institutos de investigación jugaba un papel importante en la planificación empresarial. Esta, entre otras razones, explica la cooperación estrecha con el Fraunhofer IFAM en Bremen que continúa hasta hoy en día. Del norte habían llegado el Dr. Ralf Wilken, Director del Departamento de Plasma del Instituto Fraunhofer IFAM, así como su colega el Dr. Uwe Lommatzsch, a los cuales el Sr. Buske también dio una muy cordial bienvenida en su discurso.
El gerente dio las gracias en especial a sus empleados, muchos de los cuales están trabajando para la empresa desde hace más de 10 años. El director técnico Holger Timpe pertenece a los primeros – él empezó a trabajar para Plasmatreat en 1996. Como agradecimiento y gran aprecio por su fidelidad de tantos años, Buske le regaló una deportiva e-bicicleta de trekking. "Para las largas distancias en el trabajo", dijo sonriendo.
En los últimos 20 años, la startup original de tres personas se ha convertido en un grupo de empresas medianas, que opera en 35 países y consiste de la sede principal en Steinhagen, Alemania y 15 filiales en 11 países. En el 2014, los alrededor de 180 empleados a nivel mundial realizaron un volumen de ventas de aproximadamente 30 millones de euros. De este volumen, Plasmatreat invierte anualmente el 12% en investigación y desarrollo.
Sin embargo, la gran fiesta fue otro hito en la historia de la empresa, el más joven: en enero de este año, Plasmatreat compró un terreno próximo de la sede en Steinhagen de 38,000 m². Desde entonces, las viejas oficinas allá fueron completamente saneadas. Paralelamente Christian Buske adquirió la empresa que residía en una parte de los edificios - BOLWIN & HEEMANN - Anlagenbau GmbH & Co. KG – una empresa con 70 empleados y tres filiales en Alemania, especializada en instalaciones técnicas para edificios en los sectores de ventilación y aire acondicionado, refrigeración, calefacción y fontanería. En el "equipamiento técnico de edificios industriales" el Sr. Buske ve un gran potencial para el futuro y proyecta el beneficio mutuo de sus dos empresas: "En el futuro las instalaciones técnicas para edificios serán sostenibles. Junto con el departamento de investigación y desarrollo de Plasmatreat le daremos un nuevo rostro a este sector."
La expansión continúa, el potencial para futuras aplicaciones de plasma sigue creciendo y la alegría de los empleados en Steinhagen es enorme, ya que la mudanza a las nuevas oficinas viene el próximo año.